martes, 19 de junio de 2018

Roja



Yo soy roja, roja pura. Mis sábanas son rojas, mis cortinas y la pared de mi cuarto; rojas. El 50% de mi ropa y el 80% de la de mi hijo; mi mochila favorita, el polo de mi trabajo, la funda de mi reflex, mi llavero, mis gafas y, por supuesto, mi cocina. Él se empaña en llamarme princesa..., pero yo sigo siendo tan roja como la caperuza de Caperucita, y como tal, no quiero estar entre príncipes, sino entre lobos.




2 comentarios:

Miedos

Los verdaderos momentos entre dos personas surgen cuando se empiezan a decir las verdades sin miedo a perder.  Es en ese instante cuando ...